Lifting de cara y cuello
Inevitablemente el paso del tiempo deja su huella en nuestro rostro. La genética, la prolongada exposición al sol, el estrés y la contaminación entre otras causas tienen efectos no deseados sobre nuestra cara. El lifting facial, también conocido como ritidectomía, es un procedimiento de cirugía estética facial que permite elevar la piel, tensarla y corregir. Actuando sobre la piel del cuello, barbilla, mejillas, contorno de ojos y sobre el tejido muscular, para obtener un resultado más duradero. Se consigue con ello potenciar el rejuvenecimiento, que el paciente muestre un aspecto mucho más joven y un rostro terso y libre de arrugas. La operación suele durar varias horas, bajo anestesia general.
Las incisiones necesarias para llevar a cabo el lifting facial se realizan por dentro de la línea del pelo, rodean el lóbulo de la oreja y ascienden por detrás de ésta hacia el cuero cabelludo. De este modo, las posibles cicatrices serán imperceptibles ya que quedarán “escondidas” en el cabello y en los pliegues de las orejas. En casos seleccionados se emplean técnicas de incisión corta sólo delante de la oreja, sin seguir por la parte posterior.
El lifting facial puede combinarse con otras cirugías como la blefaroplastia, eliminación de bolsas en los ojos, o rinoplastia, corrección de nariz, dependiendo de las características propias del paciente y el problema a solucionar. A su vez, puede hacerse en la totalidad de la cara, el llamado lifting facial completo, o sólo en determinadas zonas del rostro, tratando frente o cuello, aunque su efecto es más limitado. Después de la operación es posible que aparezca algún hematoma e hinchazón, pero generalmente desaparecerán en las siguientes dos semanas a la intervención. Después de la operación, el paciente tendrá que usar un vendaje que normalmente se retira después de las 24 horas y por norma general es posible hacer vida normal en una o dos semanas, dependiendo del tipo de lifting que se realice.
Recomendación del Doctor
El rostro es una de las partes del cuerpo en las que los signos del envejecimiento son más visibles. Esto es debido a que el cutis es un tegumento muy fino y delicado, que está expuesta a las agresiones medioambientales. Además, la gesticulación, la gravedad y la edad van marcando las líneas de expresión y el descolgamiento de los tejidos hasta convertirlas en pronunciadas surcos entre la nariz y la boca. Aparece grasa y arrugas alrededor del cuello o las mejillas caen. Un lifting facial puede mejorar esta situación, revertiendo los signos más visibles del envejecimiento. Las arrugas más finas, generalmente producidas por la exposición al sol, no desaparecen con el lifting facial y deberán ser tratadas con otras técnicas como el láser, el peeling,los fillers…, También puede ser muy aconsejable después de un mes someterse a un tratamiento con botox para mejorar sensiblemente el aspecto de las arrugas frontales.
Resultados
Los resultados del lifting son muy satisfactorios, aunque no son visibles de inmediato. Tras la intervención se recupera el ovalo facial, se tensan los surcos y el rostro consigue un aspecto rejuvenecido, más joven y agradable. En el postoperatorio del lifting el paciente puede sufrir ciertas molestias provocadas sobre todo por la sensación de hinchazón y la falta de movilidad facial. No obstante el posible dolor es habitualmente moderado y desaparece progresivamente. En pocos días se retiran los vendajes y en dos semanas el paciente puede reincorporarse a su actividad diaria con normalidad, evitando la exposición prolongada al sol durante varios meses.
¿Se verán las cicatrices tras el lifting?
Las incisiones necesarias para llevar a cabo esta intervención se realizan por dentro de la línea del pelo, rodean el lóbulo de la oreja y ascienden por detrás de ésta hacia el cuero cabelludo. De este modo, las posibles cicatrices serán imperceptibles ya que quedarán “escondidas” en el cabello y en los pliegues de las orejas.
¿Cómo transcurre el postoperatorio de un lifting?
Después de una cirugía facial, el vendaje se retira a las 24 horas de la intervención, las suturas de los párpados a los 7 días y las de la cara y cabeza a los 7-14 días. Las pequeñas molestias postoperatorias se pueden fácilmente tratar con las habituales medicaciones y en ocasiones es normal que ciertas zonas de la piel estén adormecidas, efecto que desaparecerá’ con el tiempo. En ocasiones es normal que ciertas zonas de la piel estén como adormecidas, este efecto desaparecerá con el tiempo. Durante los primeros días es aconsejable permanecer con la cabeza elevada para disminuir la inflamación y presentará un aspecto hinchado y amoratado pero en pocas semanas se volverá a tener un aspecto normal.
A los 10 a 15 días después de la intervención de lifting facial ya podrá hacer una vida casi normal, tendrá que tener precaución con no hacer ninguna actividad de riesgo durante al menos 15 días, cuidando de no recibir ningún golpe en la zona tratada y limitar la exposición solar durante unos meses. La hinchazón y los moratones pueden disimularse con maquillaje.